No solo es un scottish fold, sino que además lleva una boina escocesa. No podría ser más adecuado
Por norma general, cada película de Pixar se espera como agua de mayo, y no es sin razón: la compañía se ha procurado una imagen de calidad, tanto en cuestión de guiones como de animación (o infografía ¿Cuál es la palabra en estos casos). El público está atento a cada lanzamiento, fotos y noticias…y hay que estar muy despistado para no saber cual va a ser el próximo estreno. Debo estar en ese grupo, porque cuando decidí ver Brave, iba sin la más remota idea de su argumento, más allá de haberme hecho gracia el cartel con una niña pelirroja y un arco. Está visto que en el fondo, solo se entera de las cosas quien se interesa por ellas.
Por si hay alguien en la misma situación, Brave cuenta la historia de Merida, una princesa escocesa que para su desgracia, debe comportarse como tal y casarse cuanto antes por el bien del reino y de los cuatro clanes que lo forman. Lo que a la protagonista no le hace mucha ilusión, ya que ella, además de una buena arquera, prefiere rondar por el bosque y cosas poco principesas. Para ella su principal problema es su madre, que parece no entenderla, y tras una discusión con ella, escapa y encuentra en el bosque a una bruja, a la que le pide que haga cambiar a su madre. Dicho y hecho...pero la bruja en cuestión tiene una fijación con los osos similar a la mía con los gatos, porque por cambiar, cambia a su madre, pero no de opinión, sino que la transforma en oso. A partir de entonces, las dos tendrán que ingeniárselas para deshacer la maldición en dos días, o de lo contrario, el cambio será permanente.
En resumen, que el argumento es una nueva versión del tema de la comprensión entre padres e hijos, que se ha visto ya en muchas películas y con todo tipo de variantes, y si alguien esperaba que toda la escenografía de guerreros escoceses se utilizara para contar algo de aventuras o de buenos contra malos, se llevará un chasco. Pero en estos casos, lo interesante no es tanto lo que se cuenta sino cómo lo cuentan, y hay que reconocer que se han esforzado en que la película se disfrute por todos sus detalles: aunque la trama principal sea la historia de la protagonista y la maldición, hay también una secundaria que está relacionada tanto como con los personajes principales como con el de la bruja, y especialmente, su problema con los encantamientos de temática plantígrada, y la leyenda de Mor´du el Oso será parte del hilo conductor de la historia.
Tanto por el diseño de los personajes, como el comportamiento de estos, Brave busca ser una película divertida, y lo consigue. Si los hermanos de la protagonista, los tres mellizos pelirrojos, tienen un aspecto bastante mono, lo más cómico son los representantes de los clanes, en los que no se cortan en representar varios de los tópicos de Escocia. Especialmente, la parte de los highlanders (o de los que se le parecen), con las pinturas tribales azules y una secuencia en la que parodian abiertamente las portadas de algunas novelas románticas. La bruja sale muy poco, pero es un detalle curioso el que esta decida tener un negocio de talla y artesania (con esculturas de osos) visto que sus conjuros dan más problemas que soluciones.
Los padres de las criaturas. Vaya tres pies para un banco
Aún así, no es una película tan redonda como pudo ser la serie de Toy Story, o incluso Monstruos S. A., y en algunas situaciones el argumento se pasa de simplezas para solucionar algunas cosas que supuestamente, eran parte del problema principal del protagonista, o que en más de una ocasión, los chistes vengan servidos en la versión original por la forma de hablar de los escoceses. E incluso, que en alguna secuencia el pelo de la protagonista parezca más importante que la escena. Alguien en un departamento de informática se estaba tomando su trabajo como una obra de arte.
Como todas las de Pixar, y aún con sus fallos, Brave cumple y gracias a su animación, siempre resulta una película agradable de ver. Y viendo el carácter de algunos personajes, tengo la impresión de que tarde o temprano sacarán algún corto protagonizado por los tres hermanos de la protagonista.
3 comentarios:
A mi me gustó, no es de las mejores de Pixar, pero tampoco creo que desmerezca.
A mí me gustó mucho, aunque coincido en que la temática no es nada del otro mundo (la historia padres-hijos está muy explotada; aquí lo novedoso es el contexto).
Me resultó un tanto típica, pero también muy divertida. Además, a nivel gráfico es sensacional.
Satrian: está entretenida. La única que me quedó a medio ver de Pixar fue Cars. Pero seguramente porque el tema de los automóviles no me haga mucha gracia.
Kaoru Himura-Takarai: la temática no es muy original (y tiene gracia que empezara a ver la película sin tener la más remota idea del argumento), pero efectivamente, es muy divertida. La animación es todo lo que podía esperar y más, y el diseño de los personajes es casi lo más divertido.
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