lunes, 9 de enero de 2017

Aniversarios, gaticos y cambios varios


Como cada 9 de enero, celebramos el aniversario del Barrilete. Con ocho años que, aparentemente, no sería un número muy allá: es largo, pero no tiene la gracia y la ilusión del primer aniversario, ni el cruzar la frontera ficticia del quinto, la consolidación de un séptimo o los dos dígitos y la definitiva constancia de un décimo. Pero estos ocho años también vienen con su truco.

Con el 2016 terminado, puede decirse con toda seguridad que la nostalgia ha tocado techo este año: Stranger Things condensó todos los ochenta en una sola serie, llegando a ser toda una bomba durante el verano. Las entregas periódicas de Star Wars se convirtieron en una realidad…tanto, que hasta los de South Park, que no se pierden una, le dedicaron versión bastante hiriente en su última temporada, con unas simpáticas uvas pasas que nos recordaban lo divertido y lo mejor que era todo antes. También fue el estreno de Westworld, con bastantes buenos resultados y una sorpresa viniendo de una película que muchos recordábamos por Yul Brynner haciendo de robot vaquero…y que por cuestiones de tiempo, acabé por perderme, al igual que el estreno de Star Wars o de Doctor Extraño.


También ha sido un año al que bien podía decírsele tanta paz lleves como gloria dejas. Pocas veces hemos visto tal cantidad de obituarios inesperados, hasta el punto de que muchos han empezado a plantearse si David Bowie ha decidido repoblar selectivamente el más allá. Nos quedamos sin él, sin Alan Rickman, sin Leonard Cohen y sin Gene Wilder. Pero también sin Angus Scrimm, el Hombre Alto de Phantasma, o sin Andrew Sachs, el entrañable Manuel de Falwty Towers. Espero que el año que viene la Parca diversifique un poco más. Nos queda una amplia selección de banqueros y políticos. 



Desde hace unos tres meses, el número de entradas se redujo. O bueno, no tanto: solo supuso pasar de dos entradas semanales a una. Nada que implique el haberse aburrido o el ir perdiendo las ganas de seguir escribiendo, sino por razones puramente prácticas. Un traslado derivado de haber entrado en la función pública, que, al margen de todas las frases motivadoras que se oyen a menudo y el manido "el que la sigue la consigue", era lo que me había propuesto. Sí, a pesar de tener que convivir con comentarios malintencionados sobre las dos horas de café o lo bien que se vive, es simplemente poder trabajar en lo que me gusta, servir a una comunidad y no al político de turno (aunque estos vean el sector público como su cajón de las calderillas particular), y sobre todo, vivir tranquila.

...¿Cuándo dices que te marchas de nuevo?

Esto también implicó muchos cambios: pasar de una ciudad donde si caminabas recto un poco de tiempo, llegabas a la carretera general, a una donde coger dos metros se considera un trayecto medio. Desconcertarme mucho, sorprenderme más y aprender el doble, y especialmente, de echar en falta día sí y día también a Sabela y Narnia, quienes temporalmente se quedaron con la familia  y que por lo que pude comprobar, mucho ronroneo y mucho frotarme la nariz con el hocico al verme, pero viven como rajás...como le corresponde a una felina, vaya. Y también a seguir leyendo, viendo cine, series, aprovechando los viajes en tren para terminar libros e incluso para ir pensando qué gatico le iría bien a su correspondiente entrada.


Casa nueva o casa vieja, sigue sin ser la más brillante.

Hoy cumplimos ocho años que con los cambios de los últimos meses, perfectamente podría ser el primero. Seguimos un año más y lo que nos quede..

4 comentarios:

  1. Muchas felicidades por el octavo aniversario: en estas ocasiones se suele desear que cumplas al menos otro ocho más, con una o con dos entradas (yo sí echo de menos la segunda... que estoy casi tentado a pensar que también se debe a la dificultad en mantener semejante nivel cuantitativo y cualitativo de fotos de felinos :) ), pero con puntual cita semanal. Como funcionario, comparto también todas esas sensaciones: la tranquilidad de un trabajo estable, el estímulo de rendir un servicio (de una forma u otra) a la comunidad en que vivimos... y también (pese a todas las insidiosas críticas) las premuras de tiempo y trabajo (en mi caso, por rachas: exámenes, evaluaciones, correcciones.... Un beso desde el sur.


    también conozco la estabilidad que produce nuestra situación... y lo ajustado del tiempo para mantener la cita regular que supone un blog. Pero

    ResponderEliminar
  2. Muchas felicidades por el blogversay y como siempre, encantada de ver gatitos. <3

    ResponderEliminar
  3. ¡Muchas felicidades! A por otros ocho años de gaticos :)

    ResponderEliminar
  4. José Miguel García de Formica-Corsi: muchas gracias, aunque en realidad la reducción de entradas es precisamente por tiempo y no por falta de fotos de gatos en la red...Que deben ser como la energía de internet: no se crean ni se destruyen, se transforman. Curiosamente, a base de transporte público y trenes si estoy leyendo muchísimo más de lo que hice por estas fechas hace un año.
    Llevo ya unos meses en mi nueva situación y sigo convencida de lo mismo: vivo tranquila, me gusta mi trabajo y sirvo a una comunidad. No pido más, salvo poder seguir escribiendo. Un abrazo.

    Florencia: muchas gracias. Como todos los años por esta fecha, decidí hacerle una galería a Sabela y Narnia, las titulares del blog :)

    Anacrusa: por otros ocho años de gaticos, de escritores desconocidos, de zombies y de chistes sobre H. P. Lovecraft :)

    ResponderEliminar