sábado, 17 de diciembre de 2011
Darren Shan: vampiros, demonios, y más violencia que una película de Tarantino
El gatico tiene prohibido leer historias de terror, que después no duerme
El mundo de la literatura juvenil se ha vuelto cada vez más raro desde los últimos diez años. Si la quinta de los ochenta y noventa contamos, en la mayoría de casos, con Enid Blyton, hoy esta ha desaparecido de las librerías a favor de todo lo que tenga que ver con la fantasía, y, gracias a Stephenie Meyer, con vampiros. Si en España la fantasía ha pegado fuerte, los países de habla inglesa van un paso más por delante y también tienen su mercado de novelas de terror para jóvenes. Que, sin llegar a lo que llegaba Clive Barker, sí van bastante más lejos en intenciones y susto que las descafeinadas Pesadillas de R. L. Stine.
Uno de tantos, o al menos, de los que ha conseguido renombre, es Darren Shan, seudónimo del irlandés Darren O´Shaughnessy, autor de varios libros y dos series largas, The Saga of Darren Shan (Cirque du Freak en español) y Demonata. De vampiros uno, y de demonios otra, están más orientadas a la acción y el terror, con muy poco interés por el drama o el romance. Lo que tiene su gracia porque El ayudante del vampiro lo publicaron buscando más novelas para tirar del fenómeno Crepúsculo. Menudo chasco se llevarían las niñas.
Según la portada, es un vampiro. Yo hubiera jurado que solo estaba cianótico
La Saga de Darren Shan, además de tener un título muy poco original (si vas a hacer una serie de libros, al menos ponle un nombre al protagonista, no aproveches tu seudónimo) cuenta como el chaval protagonista se convierte en ayudante de un vampiro, trabaja en un circo de rarezas, y se enfrenta a una raza de vampiros malvados, sanguinarios, y que chupan la sangre hasta el tuétano cual compañía de servicios telefónicos. Los libros, repartidos en tres trilogías, llegan a abarcar varias décadas en la vida del protagonista, que no envejece.
Esta serie fue el primer éxito de Shan, llegando a tener una película, en el que según avanzan las novelas, van haciéndose notar sus temas favoritos: hay mucha acción, quizá demasiada para novelitas de menos de 200 páginas, y tanto la caracterización de algunos personajes como de las cosas que van sucediendo, llegan a ser bastante exageradas. Fin del mundo, o amenaza de fin del mundo, incluído. Que ya se sabe que para los escritores es una trama que da mucho dramatismo.
Ni en la colección Super Terror de Martinez Roca vi cosa como esta
Demonata es la segunda serie larga, con diez libros, y quizá la más bestia teniendo en cuenta el público objetivo: empieza, como suelen empezar la mayoría de novelas, con el protagonista perdiendo a su familia a manos de un demonio, el malvado de la serie, y descubriendo sus poderes. Después conocerá a su tío y otros personajes, que se dedican a combatir a los monstruos…no, original no es, más allá de narrar el punto de vista de los personajes en cada libro. Pero la gracia (es un decir) es la cantidad de violencia y sangre que es capaz de incluir en una novela juvenil sin que nadie proteste: sin llegar a un detalle excesivo, hay masacres en un hospital, mutilaciones, asesinatos varios…y hasta un personaje medio devorado por unos gusanos, ¡ahí es nada! Según no se corta en el gore que aparece en cada libro, no se pone especialmente trágico con la muerte de algunos personajes, o al menos, con lo que debería suponer para los protagonistas el presenciar semejante casquería.
Aunque las dos series se hayan terminado, solo la primera ha sido publicada en España, sin llegar a los doce que la componen. Y aunque tenga a mayores otra serie de vampiros y un par de libros independientes, ha anunciado que la próxima será sobre zombies. Con el éxito que están teniendo ahora, igual tiene suerte en España y todo…pero vistas las otras dos, no me atrevo a imaginarme lo que pueda salir de ellas.
La portada de Demon Apocalypse es una pasada.
ResponderEliminarEn la página del autor tienen el resto de portadas y son todas por el estilo. El hombre este debe haber inventado el gore para preadolescentes...
ResponderEliminarEste gatico si no le dejan leer novelas de terror seguro que las coge cuando nadie le ve, para eso es gato y lo suyo es robar, a veces sólo por el placer de hacerlo. Recuerdo que mi Garfield cuando era cachorro lo estaba alimentando todavía con leche y un día me estaba comiendo unas salchichas y se llevo una. Él no sabía qué hacer con la salchicha, sólo que algo lo había empujado a robarla y después a custodiarla echando mano de todos su bufidos jajaajja.
ResponderEliminarEstas novelas de las que hablas les van a encantar a una amiga argentina. A mí no me gusta tanta acción, aunque que quede claro que tampoco me gustan las de Crepúsculo. A mí me gustó mucho "El ansia" de Whitley Strieber y la película con Catherine Denueve y David Bowie también.
Besos amiga de los gaticos. No le leas al tuyo EL GATO NEGRO de Poe, por favor, que con ese cuento sí que tendrá pesadillas.
Ana.
Por desgracia mi gata sabe perfectamente lo que hacer con los trozos de carne que descubre, y en más de una ocasión me ha dejado sin cena.
ResponderEliminarY El gato negro de Poe no ha sido de los relatos que más me gustó...Ahora, mis simpatías están más con H. P. Lovecraft, que era un aficionado a los felinos confeso.